Hablemos sobre el ataque o derrame cerebral hemorrágico
Aproximadamente el 13% de los ataques o derrames cerebrales suceden cuando se rompe un vaso sanguíneo en el cerebro o cerca de este. Esto se conoce como ataque o derrame cerebral hemorrágico.
Cuando se presenta un ataque o derrame cerebral hemorrágico, se acumula sangre en el tejido cerebral. Esto es tóxico para el tejido cerebral, provocando que las células de esa zona se debiliten y mueran.
Un tipo de ataque o derrame cerebral hemorrágico, conocido como hemorragia subaracnoidea, puede ocurrir cuando un aneurisma (una bolsa llena de sangre que se inflama desde una arteria) en o cerca de la superficie del cerebro se rompe, inundando el espacio entre el cráneo y el cerebro con sangre.
¿Todos los ataques o derrames cerebrales hemorrágicos son iguales?
Hay dos tipos de ataque o derrame cerebral hemorrágico. En ambos, un vaso sanguíneo se rompe, interrumpiendo el flujo sanguíneo a una parte del cerebro.
Hemorragia intracerebral (el tipo más común del ataque o derrame cerebral hemorrágico):
- Se produce cuando un vaso sanguíneo sangra o se rompe en el tejido profundo dentro del cerebro.
- La mayoría de las veces, se debe a presión arterial crónicamente alta o a envejecimiento de los vasos sanguíneos.
- A veces, la causa es una malformación arteriovenosa (MAV). Una MAV es un grupo de vasos sanguíneos que se formaron de manera anormal. Cualquiera de estos vasos puede romperse y provocar también hemorragia en el cerebro.
Hemorragia subaracnoidea:
- Ocurre cuando un aneurisma (una bolsa llena de sangre que se inflama desde una arteria) en o cerca de la superficie del cerebro se rompe y sangra en el espacio entre el cerebro y el cráneo.
Además de la presión arterial alta, los factores que aumentan el riesgo de sufrir ataques o derrames cerebrales hemorrágicos son:
- Tabaquismo
- Consumo excesivo de alcohol
- Uso de drogas ilegales
¿Cómo se diagnostican los ataques o derrames cerebrales hemorrágicos?
Cuando alguien presenta síntomas de un ataque o derrame cerebral o de un AIT (ataque isquémico transitorio), un médico recopila información y hace un diagnóstico. El médico revisa los eventos ocurridos y después:
- Consulta la historia clínica.
- Realiza un examen físico y neurológico.
- Pide determinados análisis de laboratorio (sangre).
- Realiza una TAC o un examen de IRM del cerebro.
- Estudia los resultados de otras pruebas diagnósticas que podría realizar.
Mediante las pruebas de diagnóstico, se examina el aspecto del cerebro, cómo funciona y cómo llega el suministro de sangre. Se puede identificar el área lesionada del cerebro.
Las pruebas diagnósticas se dividen en dos categorías principales.
- Los exámenes por imágenes proporcionan una imagen del cerebro similar a las radiografías.
- Las pruebas para examinar el flujo sanguíneo muestran si hay algún problema que pueda ocasionar cambios en el flujo sanguíneo hacia el cerebro.
¿Cómo se tratan los ataques o derrames cerebrales hemorrágicos?
Dado que los ataques o derrames cerebrales hemorrágicos pueden ser fatales, se requiere atención médica hospitalaria. Medicamentos que se usan para controlar la presión arterial alta. Se pueden administrar otros medicamentos para reducir la inflamación del cerebro que sigue a un ataque o derrame cerebral. Según el tipo y la causa de hemorragia, puede que sea necesario realizar una cirugía.
A menudo se recomienda la cirugía para colocar un clip de metal en la base de un aneurisma o para extirpar los vasos anormales que forman la MAV.
Algunos procedimientos son menos invasivos y utilizan un catéter que ingresa a través de una arteria principal de la pierna o el brazo. El catéter se guía hasta el aneurisma o MAV, donde se coloca un dispositivo, como un espiral, para evitar su rotura.
Los cuidadores tienen una función vital en la recuperación de los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral. El apoyo emocional y práctico, así como el entrenamiento del cuidador pueden ser útiles para mejorar el equilibrio y el nivel de actividad de los pacientes.
La rehabilitación y la recuperación son determinantes clave de los resultados y la calidad de vida después de un ataque o derrame cerebral.
R: Rostro caído A: Alteración del equilibrio
P: Pérdida de fuerza en el brazo I: Impedimento visual repentino
D: Dificultad para hablar
O: Obtén ayuda, llama al 911 (o tu número de emergencia local)
Mareos, pérdida del equilibrio, dolor de cabeza intenso y repentino o dificultad para tragar son otras señales de advertencia comunes de un ataque o derrame cerebral.
¿Cómo puedo obtener más información?
- Llama al 1-888-4-STROKE (1-888-478-7653) o visita derramecerebral.org para obtener más información sobre el ataque o derrame cerebral o para encontrar grupos de apoyo locales.
- Suscríbete a nuestro boletín electrónico mensual Stroke Connection para sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral y cuidadores en StrokeConnection.org.
- Comunícate con otras personas que también han experimentado un ataque o derrame cerebral uniéndote a la red de apoyo en derramecerebral.org/reddeapoyo.
¿Tienes preguntas para tu médico o para el personal de enfermería?
Dedica unos minutos a escribir las preguntas que le harás a tu profesional de la salud en la próxima cita. Por ejemplo:
¿Qué puedo hacer para prevenir otro ataque o derrame cerebral?
¿Cómo puedo controlar mi presión arterial alta?
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