Frutas y verduras frescas, congeladas o enlatadas: Todas pueden ser opciones saludables.
¿Ha comido hoy varias frutas y verduras?
La buena noticia es que todos los productos cuentan, lo que significa que las variedades enlatadas, frescas y congeladas pueden ayudarlo a alcanzar su objetivo.
A continuación, le explicamos cómo elegir los mejores productos:
Frutas y verduras en lata
Las frutas y verduras en lata son ideales para tenerlas en la despensa para esos momentos en los que no puede ir a comprar; incluso se pueden guardar en el trabajo (con un abrelatas) como bocadillo por la tarde. Como no caducan pronto, no desperdiciará dinero cuando compre verduras en lata (lo que a veces ocurre con productos frescos que se estropean).
- Tenga cuidado con el sodio: El sodio se añade normalmente a los alimentos en lata para conservarlos. Busque alimentos con etiquetado bajo en sodio, sodio reducido o sin sal. Compare el contenido de sodio en la etiqueta de información nutricional y elija el producto con la cantidad más baja. Escurra y enjuague las verduras en lata para reducir aún más el sodio.
- Tenga cuidado con el azúcar añadido: Busque frutas enlatadas en agua, en su propio jugo o en almíbar ligero (escurra y enjuague).
- Usos deliciosos:
- Añada latas escurridas de maíz, tomates y frijoles pintos o cualquier otra verdura al caldo de pollo bajo en sodio para elaborar una sopa de verduras superrápida y que llene.
- Utilice una licuadora, un procesador de alimentos o un tenedor para aplastar y mezclar los garbanzos, los frijoles blancos o cualquier otro tipo de frijol escurridos y enjuagados en una salsa de frijoles para zanahorias bebé; añada un poco de jugo de limón y ajo en polvo para la salsa.
- Sirva la fruta en lata como postre cubierta con yogur bajo en grasa y sin azúcar añadido, o cubra los cereales integrales con fruta en lata.
Frutas y verduras congeladas
Estos alimentos se cosechan en el momento de mayor maduración y posteriormente se congelan para conservar una nutrición óptima. Duran varios meses en el congelador y pueden ser una opción muy económica.
- Tenga cuidado con el sodio: Compare el contenido de sodio en la etiqueta de información nutricional y elija el producto con la cantidad más baja. Las salsas y los condimentos pueden contener exceso de sal y añadir calorías.
- Tenga cuidado con el azúcar añadido: Elija 100% fruta congelada sin azúcares añadidos.
- Usos deliciosos:
- Cuando hierva la pasta, añada algunas verduras congeladas al final del tiempo de cocción para añadir nutrientes y un toque de variedad.
- Prepare un batido de fruta congelada, leche descremada o semidescremada y yogur.
- Mezcle las frutas del bosque congeladas en productos horneados y avena.
Frutas y verduras frescas
Las frutas y verduras frescas son fáciles de llevar. Cada vez que salga de casa, acostúmbrese a meter un bocadillo fresco en el bolso o la mochila; piense en una manzana, una naranja, un plátano, uvas o zanahorias bebé. Estos bocadillos lo mantendrán con energía y evitarán que compre bocadillos menos saludables en las máquinas expendedoras.
- Busque las opciones de temporada: Las recetas saludables para su corazón sabrán aún mejor con productos que están en temporada.
- Usos deliciosos:
- Cubra los sándwiches con verduras adicionales.
- Sirva verduras cortadas con humus o con salsas “ligeras” para tomar un bocadillo saludable.
- Sirva una colorida ensalada de frutas para el postre.
- Añada puré de frutas y verduras a salsas, batidos, sopas y mucho más para potenciar el sabor y los nutrientes.