El sodio y los niños
La mayoría de los niños toman demasiada sal, pero puede ayudarlos a que sigan una senda más saludable desde el principio. A continuación se explica cómo puede afectar el exceso de sodio a su salud cardíaca y lo que puede hacer al respecto.
¿Cuánto sodio consumen los niños y los jóvenes en los EE. UU.?
En promedio, los niños de 2 a 19 años ingieren más de 3100 mg de sodio al día, aproximadamente el doble de la cantidad recomendada por la American Heart Association. Los niños más mayores tienden a tomar más calorías y sodio.
En el grupo de edad de 2 a 19 años compuesto por chicos y chicas, los chicos de 12 a 19 son los que ingieren más sodio, una media de 4220 mg/día. Las chicas del mismo grupo de edad toman unos 2950 mg/día.
¿Dónde obtienen los niños el sodio?
Los niños de 6 a 18 años obtienen aproximadamente:
- el 14% en el desayuno
- el 31% en el almuerzo
- el 39% en la cena
- el 16% a la hora del aperitivo
Los alimentos de las tiendas de comestibles y de restaurante constituyen el 81% del sodio que comen, lo que significa que están en sus alimentos desde un principio y no pueden eliminarlo.
Según los datos nacionales sobre los hábitos alimentarios de los estadounidenses, estos alimentos son los principales factores que contribuyen a la ingesta de sodio en los niños:
- Pizza
- Pan y bollos
- Embutidos
- Aperitivos salados (como papas fritas y galletas saladas)
- Bocadillos (incluidas las hamburguesas de carne)
- Queso
- Hamburguesas de pollo, nuggets y tiras de pollo
- Platos mezclados de pasta (como espaguetis con salsa)
- Platos combinados mexicanos (como burritos y tacos)
- Sopas
Los seis alimentos principales se ilustran en nuestra infografía sobre seis alimentos muy salados para niños.
Las marcas y los restaurantes fabrican versiones de los mismos alimentos con diferentes niveles de sodio, y algunas opciones incluso están fabricadas con menos sodio a propósito. Puede tomar decisiones más saludables sobre los alimentos que come mediante la comparación de etiquetas para elegir el producto con la menor cantidad de sodio que pueda encontrar.
¿Cómo puede afectar demasiado sodio a la salud de mi hijo?
Ingerir demasiado sodio se asocia a una mayor presión arterial en niños y adolescentes, y el efecto es incluso superior si tienen sobrepeso u obesidad. Los niños con dietas altas en sodio tienen casi un 40% más de probabilidad de sufrir hipertensión arterial que los niños con dietas bajas en sodio.
Existe un vínculo entre la hipertensión arterial en la infancia y la hipertensión arterial en la edad adulta. La hipertensión arterial en la infancia se relaciona con el desarrollo precoz de cardiopatías y el riesgo de muerte prematura. Los niños con dietas altas en sodio tienen casi un 40% más de probabilidad de sufrir hipertensión arterial que los niños con dietas bajas en sodio.
Afortunadamente, la reducción de la presión arterial durante la infancia puede ayudar a reducir el riesgo de hipertensión arterial como adulto. Puede ser tan sencillo como ayudarlos a consumir menos sodio, lo cual puede contribuir a reducir la presión arterial en niños y adolescentes.
¿Cómo puedo reducir el sodio que toman mis hijos?
Asegurarse de que sus hijos consuman menos sodio hoy puede ayudar a prevenir la aparición de cardiopatías en el futuro, especialmente en el caso de niños con sobrepeso y obesidad. Obtenga más información sobre cómo reducir la ingesta de sodio.
A continuación presentamos algunas ideas estupendas para los padres:
- Cree modelos saludables de alimentación. Utilice la dieta y las recomendaciones de estilo de vida de la American Heart Association como guía.
- Involucre a sus hijos mientras prepara comidas saludables. Pruebe algunas de nuestras recetas infantiles.
- Pida al encargado de la tienda de comestibles que le ofrezca los alimentos favoritos de su familia en versiones con menos sodio. Y busque la certificación Heart-Check para ayudar a elaborar un plan de alimentación saludable para el corazón.
- Antes de salir a comer, consulte la información nutricional online para encontrar las opciones más saludables.
- Fomente cambios que den lugar a comidas más saludables en centros de cuidado infantil y escuelas.
¿Cómo podemos desarrollar las papilas gustativas de los niños para que no echen de menos la sal adicional?
¡Empiece de joven! Nuestras preferencias de sabor a la sal se van formando con lo que comemos en las primeras etapas de nuestra vida. Es posible que los niños no prefieran tanta sal si toman alimentos con menos sodio desde una edad temprana. También puede ayudar mediante la reducción gradual del sodio en sus alimentos. Es posible que ni siquiera note la diferencia.